miércoles, 25 de mayo de 2011

Mi pobre conciencia.

Nunca me la robaron. Siempre que sucedió fué unilateral.. aunque ya no recuerdo donde, ni cuando. Si es que eso importa.
Y si no fue robada, ¿será que la presté? O precisando más.. ¿la cedí?
Pero que es mía, seguro! Bueno, no tanto en esos términos.. Digamos mejor que.. ¿ me corresponde?
¿Quizás ese es el topo de tierra inca que andaba buscando? La parcelita donde poder construir mi hogar, la casita de de adobe.. ¡que iluso!
Ahora está toda fragmentada, esparcida y apropiada. Por que aunque no se pueda poseer, cuando no se tiene, es por que tiene dueño. Mi pobre conciencia.
Caminando por el mundo, desnudo, con muletas, sin hogar.. Encuentros fortuitos, cruces de miradas en los que siempre nos reconocemos, nos amamos por un instante y..


Yo si espero volver contigo.

1 comentario: